"I've got sperm!"

TÍTULO ORIGINAL: If these walls could talk 2

TÍTULO EN ESPAÑOL: Mujeres enamoradas/Si las paredes hablaran
DIRECTOR: Jane Anderson (1961), Martha Coolidge (1972), Anne Heche (2000)
PAÍS: Estados Unidos
AÑO: 2000
REPARTO: Vanessa Redgrave, Marian Seldes, Paul Giamatti, Elizabeth Perkins (1961), Michelle Williams, Chloë Sevigny, Nia Long, Natasha Lyonne, Heather McComb (1972), Sharon Stone, Ellen DeGeneres, Ragina King, Kathy Najimi (2000)
SINOPSIS: A lo largo de tres historias, ambientadas en diferentes momentos históricos, las directoras dan cuenta de cómo ha evolucionado la respuesta social al lesbianismo. Son tres historias de amor que ocurren en la misma casa, pero en tres años diferentes: 1961, 1972 y 2000. La primera nos presenta una relación entre dos mujeres maduras, no aceptada por sus familiares, y la falta de derechos legales. La segunda nos habla del enfrentamiento de una estudiante con sus amigas, todas lesbianas y feministas, por haberse enamorado de una mujer muy masculina. El tercer relato aborda el debate de una pareja sobre la concepción de un hijo.

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Si las paredes hablaran 2 es una peli realizada para la televisión. Esta es la segunda entrega, aunque no crean que es una continuación de la primera, llamada igual, pero el tema en cuestión era el aborto. En su año de estreno ganó un Emmy como Mejor película para televisión.

Yo digo:
Muy buenas historias que cuentan cómo evolucionó (o no) la mirada sobre el lesbianismo.
La primera es la más triste de todas, Redgrave y Seldes viven juntas desde hace añares, pero para sus respectivas familias son muy buenas "amigas". El compañerismo que se aprecia es entrañable, y ni hablar del amor. Después somos testigos impotentes del despojo, de la ignorancia y del egoísmo.
Cuando comenzó la segunda historia, If me dijo: "Uhhh, esto pinta mal" (en la primera no hubo duda). Williams es una lesbiana que vive con sus amigas lesbianas, todas son feministas que tienen un grupo en la universidad que lucha por los derechos de las mujeres. Una noche sale con sus amigas y conoce a Sevigny, toda una chonguito. Acá nos encontramos con la discriminación e intolerancia a lo diferente, algo incomprensible si recordamos de quienes estamos hablando.
La última, es la más light y divertida de todas. Sharon y Ellen son una pareja moderna que ansía tener un hijo. Así que deben decidir con qué donante se quedan. Muy divertida y vertiginosa como ellas, pero también muy tierna. ¡Qué raro no ver a Stone actuando de gato!
Película muy recomendable, si pueden, véanla.

Ella dice:
Bueno, bueno bueno. Me he encontrado con una película que me ha gustado y mucho. Tres historias para pensar sobre el quehacer de las lesbianas y sus conflictos. La primera historia nos trae a la bellísima Vanessa Redgrave como una lesbiana de la tercera edad y los derechos a vivir la tristeza y conservar los recuerdos de tu ser amado en una sociedad que no está dispuesta a cederlos. Otra historia sobre la discriminación intragrupal, en donde se estigmatizan ciertos rasgos diacríticos por considerarlos provenientes de la cultura machista sin darse cuenta de la resignificación posible. La ultima historia es la de dos mujeres (Ellen Degeneris y Sharon Stone) intentando concebir una hijo. Las alegrías y las desazones de una pareja que sabe que en última instancia tendrán que elegir introducir un hombre (al menos su semen) en un relación en donde no existen los hombres. Cada una de las historias se desarrolla en un momento específico de la historia norteamericana y de los derechos de las parejas gays en ese momento. Cada una de las historias transcurre en esa misma casa. Empieza triste pero el final a toda locura y amor entre Sharon y Ellen nos levanta el ánimo, aunque en ese momento fue en el que se me cayeron las lágrimas, de alegría, pero lágrimas al fin. Esta muy buena para recomendarla y pensar en todo aquello en lo que hemos avanzado en materia de derechos y en todo lo que nos falta avanzar en materia de intradiscriminación. La estgmatización del "otro" se da, y mucho, dentro de la comunidad gay. Y lo que parece un himno a la diversidad termina siendo el canto de que si son gays, que seamos más o menos lo mismo. Para pensar.